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El scratching endometrial, también conocido como raspado endometrial, se trata de una pequeña intervención quirúrgica en la que se realiza un mínimo daño dentro de la pared interna del útero para que, de este modo, se regenere y aumente la receptividad. Si quieres conocer todo sobre este proceso tan utilizado cuando se dan fallos repetidos de implantación, no te pierdas lo nuevo de MiFertilidad. ¡Sigue acompañándonos!
Tal y como hemos podido mencionar brevemente, el scratching del endometrio consiste en un sencillo raspado de esta capa mucosa que recubre las paredes internas del útero y que tiene un papel fundamental para la implementación del embrión.
De esta forma, el principal objetivo de la intervención es que dicha capa pueda regenerarse correctamente, aumentando su receptividad y logrando así el embarazo. En este sentido, se trata de un proceso nuevo que cada vez más clínicas de reproducción asistida incorporan en sus servicios dada la sencillez del proceso y los buenos resultados.
Si bien es cierto que el scratching endometrial siempre tiene el mismo objetivo y tiene una duración de aproximadamente 15-20 minutos, podemos diferenciar dos procesos para llevarlo a cabo:
Por su puesto, la paciente podrá realizar vida normal después de estos dos procedimientos, aunque es habitual que aparezca un leve sangrado.
Esta técnica de reproducción asistida se tiene que llevar a cabo durante la fase lútea del ciclo menstrual. Es decir, sobre el día 21 del ciclo en el caso de que sea regular.
Por regla general, para aquellas pacientes que van a someterse a un tratamiento de Fecundación in Vitro, este raspado se hace en el ciclo previo. También ocurre del mismo modo en caso de transferencia de embriones congelados o de ovodonación.
Por otro lado, conviene indicar que el scratching endometrial se emplea para las mujeres que han sufrido fallos de implantación repetidos. Habitualmente, el problema no nace de los gametos de los progenitores, sino de la comunicación entre el embrión y el útero.
Aún no están claros los motivos por los que el raspado endometrial aumenta la tasa de implantación embrionaria, aunque los estudios realizados sugieren que el scratching da lugar a una respuesta inflamatoria parecida a lo que ocurre con un rasguño en la piel.
De este modo, el proceso de reparación en la zona del endometrio incrementaría las posibilidades de implantación por favorecer la liberación de factores de crecimiento y activar genes responsables del éxito en el procedimiento.
Como hemos advertido a lo largo del post, el raspado es un proceso seguro y mínimamente invasivo. No obstante, hay que destacar unos leves efectos secundarios de su realización.
Es el caso de tener un leve sangrado tras la intervención o la aparición de calambres abdominales. El hecho de sufrir una infección pélvica o una perforación es muy remoto.
Esperamos haber resuelto todas tus dudas sobre esta prueba tan novedosa. Si estás buscando el embarazo a partir de medicina reproductiva, MiFertilidad es tu sitio. Estaremos encantados de atenderos conseguir vuestro sueño de ser padres y madres.
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