Tu carro está vacío
A la hora de lograr el embarazo y crear la familia que tanto deseamos, muchas veces no nos planteamos que se trata de un camino cada vez más complicado. Especialmente si la mujer es mayor de 35 años, pudiendo necesitar óvulos donados.
No obstante, también existen casos en los que en un tratamiento de reproducción asistida no sólo necesitaremos los anteriores, también espermatozoides de un donante masculino. En este sentido, podemos optar por una FIV o una embriodonación. ¿Quieres saber todo sobre esta última? ¡Te lo contamos en MiFertilidad!
Tal y como hemos podido adelantar brevemente, la embriodonación consiste en un tratamiento de reproducción asistida en el que una mujer o una pareja desea conseguir el embarazo recibiendo embriones obtenidos mediante una previa fecundación en laboratorio. Una donación procedente de una pareja anónima que decide donar sus embriones a otras personas para cumplir su sueño.
Para ello, esta pareja habrá firmado previamente un escrito en el que renuncia a los mismos y, con ello, la filiación de futuro pequeño.
¡Ni por asomo! No debemos confundir la embriodonación con estos términos. Si bien es cierto que el acto en sí es el mismo, este proceso es mucho más económico, no se realiza por separado y transmite embriones ya formados, los cuales proceden de un ciclo de FIV anterior.
En este sentido, cabe indicar que se trata de un procedimiento totalmente legal, tal y como estipula la Ley 14/2006 sobre técnicas de reproducción humana asistida. También que los pacientes receptores no podrán conocer la identidad de los donantes, ni viceversa. ¡Es un acto completamente altruista y anónimo!
Una vez que han sido fecundados los embriones de la pareja donante, estos quedarán vitrificados en nitrógeno líquido a -196ºC, conservándose perfectamente y preservando que su calidad no se vea afectada.
Evidentemente, previamente a este proceso se ha realizado una selección embrionaria según las características de la pareja o la mujer que dona dichos embriones. Siguiendo en esta línea, las muestras no pueden ser de mujeres mayores de 35 años, no debe haber ningún antecedente personal ni familiar que pueda afectar a la genética, etc.
Dicho esto, el proceso se realiza de la siguiente manera:
Este proceso de reproducción asistida se recomienda especialmente en casos en los que ambos miembros de la pareja tienen problemas de fertilidad. No obstante, también es un tratamiento indicado para mujeres que desean ser madres solteras o parejas de mujeres homosexuales en las que exista una causa de infertilidad o esterilidad.
Tal y como hemos adelantado a lo largo del post, no sólo se trata de un procedimiento más económico, también tiene unas tasas de éxito muy elevadas, ya que los embriones son de buena calidad.
Desde MiFertilidad esperamos haberte sido de ayuda e interés a la hora de hablar de esta técnica de reproducción asistida. En nuestro blog encontrarás toda la información necesaria sobre los procesos médicos para lograr el deseado embarazo.
En caso de querer someterte a ellos, ¡contáctanos a Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.!
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